Ya desde la antiguedad, los griegos conocían el fenómeno producido por la luz, al pasar por un pequeño orificio de una habitación a oscuras, el cual forma una imagen invertida de la escena del exterior sobre la pared opuesta. En esto consiste el principio de la cámara oscura.
La cámara oscura no es más que una caja hermética a la luz, con un pequeño orificio en una de sus caras, que permite el paso de alguno de los rayos de luz que reflejan los objetos que están a su lado.
Si el orificio es muy pequeño va a pasar de cada sector de la figura un solo rayo de luz que va a conformar una imagen muy definida pero oscura. Si agrandamos el orificio van a ingresar varios rayos de luz por cada punto de la imagen, haciendo una imagen más luminosa pero borrosa.
"Punto de vista desde la ventana en Le Gras" - Niépce 1827 Fotografía más antigua que se conserva. |